La comunicación entre Padres e Hijos en la adolescencia

 La adolescencia es el periodo de la vida más difícil y complicado de describir. Los cambios biológicos de la pubertad son universales, pero las diferencias concretas en su expresión, en su  secuencia y amplitud varían en cada uno. La comunicación en esta etapas resulta confusa y la relación con los padres genera situaciones de tensión. El primer paso es comprender que “es imposible no comunicarse” por lo tanto todo es comunicación . Si partimos de esta premisa  el segundo paso es “conocer “ con quien me comunico de esta manera comprender la etapa adolescente es sentar las bases para mejorar el vínculo entre padres e hijos.

En la cultura moderna la adolescencia abarca un periodo de por lo menos 10 años y tanto su inicio como su final suelen se poco precisos. 

Muchas definiciones recogen su carácter de etapa del desarrollo evolutivo: “la adolescencia es una fase del desarrollo de la personalidad situada entre los cambios puberales y la edad adulta”. Si bien es una etapa de transición posee sus características propias.

La considerable distancia que existe entre la conducta infantil y la conducta adulta no se podría salvar sin el “equipamiento”  que se adquiere en la adolescencia. Este periodo de transición tiene como objetivo lograr la madurez emocional que consiste en  el aumento creciente de la confianza en uno mismo y el la adopción cada vez de más responsabilidades para regular la propia conducta.

La función de la adolescencia no es aislar a la persona, no es separarlo de su etapa anterior y de la siguiente sino lograr una transición armónica. No se trata de romper con el pasado  (infancia)  ni negar el futuro (adultez), en definitiva lo que se busca  es que los chicos y las chicas se hagan mayores.

Es fundamental partir de una visión positiva de la adolescencia, durante muchos años se la definió como la edad de las anomalías, “la edad difícil”, “la edad de la rebeldía” etc. Sin embargo, es la edad donde surgen nuevas e importantes capacidades, lo que supone un salto cualitativo en el desarrollo de la personalidad, (reflexión, sentido crítico, razonamiento, autonomía moral, intimidad, apertura etc.)

La adolescencia media a diferencia de la anterior se caracteriza por los cambios psíquicos. Se trata de un proceso esencialmente psicológico si bien continua el desarrollo fisiológico, ahora se realiza a menor ritmo. El cuerpo va adquiriendo ya una armonía en sus proporciones.

Este cambio se origina principalmente en el descubrimiento del yo. Hemos pasado del “despertar del yo “al “descubrimiento consciente del yo”, el púber se limita a sentir que es diferente a los demás, el adolescente medio en cambio, se observa se analiza a si mismo por dentro, profundiza en su mundo interior en su intimidad, es una época de introspección orientada hacia el autoconocimiento y la autocomprensiòn.

Este descubrimiento favorece la diferenciación de la personalidad el adolescente asume un tipo de personalidad concreto entre muchas posibles, busca nuevas formas de comportamiento cada vez mas autónomas.

En el adolescente de esta fase coexiste la euforia de sentirse mas capaz que antes, con el pesimismo que proviene de no conseguir la autonomía que se había propuesto. Esto explica algunas conductas contradictorias y ambivalentes:

  1. Inconformismo-conformismo
  2. Independencia-dependencia
  3. Apertura- retraimiento.

Duda entre actuar como una persona mayor o como un niño. Ha experimentado que el comportamiento autónomo esta mucho mas expuesto al error y al fracaso que el comportamiento dependiente. Muchas veces movido por el miedo a fallar, da un paso para atrás: regresa a conductas infantiles que están exentas de grandes problemas.

En otras ocasiones ante la misma situación de miedo da un paso adelante: el de la rebeldía agresiva., reaccionando generalmente contra los padres.

Esto demuestra que estamos ante una crisis hacia adentro, es una crisis de personalidad, al servicio de la construcción de la misma.

La capacidad de introspección, el poder mirar hacia adentro, el autoconocimiento esta dado por los cambios producidos  a nivel cognitivo con la aparición del pensamiento formal, decisivo para el progreso del desarrollo de la personalidad total.

Se produce un perfeccionamiento de las estrategias cognitivas. El pensamiento formal es pensamiento reflexivo: es la capacidad de pensar sobre el propio pensamiento, de analizar que se esta pensando y como se esta pensando.

Esta capacidad de reflexionar el adolescente puede salir del reducido ámbito de lo concreto para acceder al ámbito de lo posible y abstracto, de esta manera puede establecer teorías. El pensamiento formal es pensamiento de lo posible. Es capaz de formular hipótesis, de contrarrestarlas con la realidad, y de deducir consecuencias.

Su pensamiento es hipotético-deductivo. La inteligencia tiene un valor instrumental.

Utiliza las aptitudes básicas de la inteligencia: razonamiento, concepción espacial, compresión y fluidez verbal.

La evolución cognitiva favorece la evolución de la moral. Surge la capacidad para el razonamiento moral, pasa de la moral heterónoma a la moral autónoma, las normas ya no son vistas como algo meramente coercitivo, sino como valores que hay que asumir e interiorizar. Esta interiorización hace posible la conciencia del sentido del deber. Surgen las motivaciones internas. Los valores no se reducen a principios teóricos sino que se integran en un ideal personal elegido libremente y encarnado en modelos humanos.

En el plano afectivo se produce una profundización de la intimidad . Toda la conducta adquiere una tonalidad afectiva. Es la etapa de los sentimientos esto se debe a que la afectividad es mas conciente que antes. En edades anteriores  cada estimulo iba seguido de una respuesta inmediata y por ello primaria. En cambio en esta fase entre el estimulo y la respuesta hay un tiempo de reflexión, puede o no expresarla, recordemos que surge la intimidad, el descubrimiento de lo propio.

Los sentimientos son la verdadera riqueza psicológica de los adolescentes influyen sobre la personalidad en su totalidad para bien o para mal.

Los sentimientos positivos que prevalecen son: afecto, ternura, alegría, amor, amistad . Los negativos son, principalmente los que están asociados a conductas de repliegue.

A lo largo de esta etapa surgen dificultades emocionales ligadas a necesidades de la personalidad no satisfechas:

  1. Necesidad de identidad
  2. Necesidad de afecto
  3. Necesidad de realización personal
  4. Necesidad de independencia
  5. Necesidad de relación social

 

El notable desarrollo de los sentimientos se encauzan a través de la amistad y el amor.

La adolescencia superior o final significa salida de la crisis de personalidad de la etapa anterior: recuperación del equilibrio, de la estabilidad y de la paz interior.

La adolescencia intermedia sirvió para desplegar nuevas capacidades y para ser consciente de las posibilidades personales.

La personalidad se afirma con la autoexigencia y el afán de superación. 

Una de las conquistas más importantes es la aparición de la capacidad de profundización y del pensamiento especializado. Hay un mayor equilibrio entre la introversión y la extroversión. Al disminuir el egocentrismo, el joven esta en condiciones de mantener con otros una relación de persona a persona,.Ahora es capaz de ver al “tu” como una realidad diferente e independiente. El descubrimiento del tu conlleva al desarrollo de sentimientos sociales: altruismo, comprensión, compasión, sacrificio, entrega, etc. Es un factor clave para la maduración de la amistad y el amor.

Las relaciones sociales son mas amplias y variadas que antes, no se limitan a los amigos íntimos.

La tarea fundamental de esta etapa es el cultivo de la vida interior.

El adolescente accede a la madurez propia del adulto responsable a través del:

 

  1. aislamiento a la apertura de los demás
  2. la rebeldía en función del capricho a la rebeldía en función del deber
  3. conformismo al afán de superación
  4. individualismo al comportamiento solidario
  5. miedo a la vida a la alegría por vivir
  6. dogmatismo y la rigidez a la tolerancia y a la flexibilidad
  7. autosuficiencia a la disposición para aprender de los demás y para aceptar ayuda.

 

Es el momento de las grandes elecciones en el terreno del estudio, de la amistad, del trabajo y del amor. Estas elecciones se concretan en un proyecto personal de vida. El proyecto vital se convierte así en un medio insustituible para el perfeccionamiento personal.

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