Hace pocos días se celebró el día internacional de los #abrazos. Ese gesto que surge de lo más profundo del alma y nos funde través del con-tacto con el otro. Ese calor que nos da seguridad y #refugio. Esa #contención que transmite “aquí estoy”. Que importante darnos ese espacio para los abrazos. Los niños buscan los abrazos para regularse, dar afecto o dormir en #calma.
Hoy la ciencia confirma la importancia de los abrazos para la salud integral; se sabe que con tan solo 20 segundos de un abrazo puede reducir el #estrés y fortalecer el sistema inmunitario, gracias a la liberación de oxitocina, y fundamentalmente la presencia del otro. Ese encuentro irreemplazable que da sentido, que permite apoyarnos mutuamente. En un tiempo donde pareciera que siempre hay “algo” que media entre unos y otros, volver a #abrazarnos es una necesidad prioritaria.
Existen distintos tipos de abrazos: los de padres que dan seguridad, los de pareja ofrecen apoyo mutuo, y los de amigos que nos recuerdan que no estamos solos.
La práctica del abrazo es el camino hacia el #encuentro, la #reconciliación y el #amor.
