Cuando el miedo nos paraliza

Les comparto el diálogo que tuvimos en el programa La Búsqueda de Florencia Gallo en Radio Milenium. Hablamos sobre el miedo en tiempos de covid y qué podemos hacer para controlarlo.

El miedo es una respuesta fisiológica del organismo, frente a una amenaza el miedo nos hace detenernos y pensar cómo actuar. Pero cuando nos paraliza, nos bloquea y nos deja sin movimiento frente a lo que vemos como amenaza. Internamente se agranda y lo vemos más poderoso. El miedo bloquea nuestra capacidad de discernir.

La falta de recursos internos nos puede llevar a una toma de decisiones confusa donde no tenemos claridad. Caemos en un miedo irracional, es una situación en la que debemos evitar los extremos: la negación (negar la realidad que está sucediendo) ni quedarnos en una parálisis extrema sin posibilidad de movimiento, con tal nivel de temor que la vida se transforma en algo que parece no ser vida. En el medio encontramos al miedo funcional, aquel que nos hacer estar atentos y conscientes para tomar medidas, como un semáforo. A partir de ahí debemos desarrollar recursos internos que nos permitan tanto el cuidado personal como el del otro.

Algunas consideraciones para evitar caer en la parálisis:

  • «El que espera, desespera»: Evitar entrar en la desesperación, quedando atrapado en el imaginario de que no se puede salir de esto. La pandemia no será eterna ni es el fin del mundo, es una situación que va a pasar.
    En lugar de preocuparse, ocuparse de aquello en lo que sí podemos ocuparnos: reconocer el miedo y buscar qué puedo hacer con eso, pensar cómo me puedo cuidar para minimizar los riesgos y también evitar el exceso de información.
  • Quedarse atrapado en la preocupación es poner el foco en lo que aun no está sucediendo, bloqueando la posibilidad de seguir con la vida cotidiana. Debemos poner el foco en lo que estamos haciendo momento a momento. Ya que hay muchas cosas que no podemos controlar, desarrollar la confianza en que lo que vamos haciendo en nuestra cotidianeidad es lo mejor para transitar la situación.
  • Desarrollar la flexibilidad y capacidad de adaptación para que la preocupación nos tome. Nuevamente, ocuparse de las cosas lindas que nos van sucediendo en la cotidianeidad.
  • Poner en palabras lo que sentimos: La palabra ayuda a dar sentido a las cosas; cuando ponemos en palabras lo que nos pasa podemos integrarlo en la comprensión. Al ponerlo en palabras le doy un sentido y significado que nos permite comprender. Además, en el intercambio con el otro podemos ir ayudándonos mutuamente.

La importancia de buscar en el interior

Cuando hay una tormenta en el único lugar donde hay quietud es en el centro, en el ojo del huracán. Esta metáfora nos indica que es en el interior de cada uno donde no reside el miedo sino la calma. Buscar dentro de nosotros mismos nos ayudará a transitar. No se trata de negar la tormenta sino de entender a dónde queremos ir.

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